El Tour de Francia hace caso omiso a la decisión del gobierno y mantiene sus fechas, entre el 29 de agosto y el 20 de septiembre para hacer la carrera.
Este martes, el Ejecutivo del país galo anunció la prohibición de toda manifestación deportiva de más de 5 mil espectadores antes de septiembre.
Los organizadores de la ronda ciclista gala, que ya la desplazaron dos meses, deberán estar pendientes de la evolución de la situación sanitaria del país.
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Ello dependerá para mantener la posibilidad de efectuar la carrera ciclística más importante del mundo.
A ese respecto, el Ministerio de Deportes señaló que se analizará la situación periódicamente, para tomar decisiones más precisas en las próximas semanas.
Indicó que no se descarta que los organizadores deban proceder a ajustes en el dispositivo, para limitar el número de espectadores en las salidas y las metas.
Todo ello está siendo analizado por los organizadores del Tour, que ya hicieron algo parecido en marzo pasado durante la París-Niza.
Entonces se redujo el público justo antes de que Francia decretara el estado de alerta sanitaria.
Aunque el Tour de Francia hace caso omiso a la decisión del gobierno, está abierta la posibilidad que sea una excepción a la misma.
El Tour de Francia hace caso omiso y mantiene fechas
Otro de los puntos de interrogación atañe a la situación de forma en la que estarán los ciclistas a la competición y si podrán llegar de todos los rincones del planeta.
El colombiano Egan Bernal, ganador de la pasada edición, recibió un permiso especial de las autoridades de su ciudad para poder entrenar al aire libre.
Los ciclistas franceses también acogieron con satisfacción, el anuncio del Gobierno de que podrán hacerlo, de forma individual, a partir del próximo 11 de mayo.
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Se mantiene, sin embargo, la duda sobre la posibilidad de organizar alguna carrera en agosto para preparar el Tour.
Los organizadores de la ronda gala habían previsto la Dauphiné un par de semanas antes del inicio del Tour en Niza.
Pero ahora tienen que estudiar si eso entra dentro de los límites impuestos por el Ejecutivo.
El primer ministro impuso su veto a deportes de equipo disputados en recintos cerrados y que reúnan a más de 5 mil personas.
En ese sentido, el ciclismo tiene a su favor la baza de celebrarse al aire libre, aunque no está claro si recibirá el aval de las autoridades.
