La oposición chilena presentó este miércoles en la Cámara de Diputados una acusación constitucional (juicio político) para destituir al presidente del país, Sebastián Piñera.
Esto tras las supuestas irregularidades en la venta de un proyecto minero desveladas en los Papeles de Pandora.
«Las causales de esta acusación constitucional son dos. Una, porque el presidente ha infringido abiertamente la Constitución en relación al principio de probidad; en segundo lugar, por comprometer gravemente el honor de la Nación«. Así lo anunció el diputado socialista Jaime Naranjo, rodeado de representantes de todas las bancadas opositoras.
Para Tomas Hirsch, de Acción Humanista, la acusación constitucional «marca un hito histórico» en Chile y la presentó «la oposición completa, unida».
«Tenemos que tomar decisiones pensando en Chile y no es soportable tener un presidente acusado de esta manera por delitos de corrupción», agregó el democristiano Gabriel Ascencio.
La acusación constitucional es un procedimiento que se contempla en la ley chilena. Este faculta a los diputados a iniciar un juicio político contra una autoridad y puede desembocar en la destitución o la inhabilitación para ejercer cargos públicos de Piñera
Para que el mecanismo prospere, se requiere la mayoría absoluta en la Cámara de Diputados -el órgano encargado de establecer si la acusación es o no viable-, y el posterior respaldo de dos tercios en el Senado, institución que actúa como jurado y declara si el acusado es culpable o inocente de aquello que se le imputa.
Vía EFE