Pacientes trasplantados y con enfermedades autoinmunes en riesgo
La Organización Nacional de Trasplante de Venezuela (ONTV) emitió un comunicado este martes alertando sobre la crítica escasez de inmunosupresores en el país durante los últimos cinco meses, lo que pone en peligro la vida de pacientes trasplantados y aquellos con enfermedades autoinmunes.
En el documento, la ONTV expresó su «profunda preocupación» y exigió al Ministerio de Salud tomar medidas urgentes para restablecer el suministro de estos medicamentos esenciales.
«La falta de inmunosupresores pone en riesgo la salud de muchos pacientes y podría generar un aumento de complicaciones médicas, hospitalizaciones y el retorno a diálisis, lo que sobrecarga aún más el sistema de salud pública», advirtió la organización.
Un problema de salud pública en aumento
La escasez de estos fármacos esenciales afecta a alrededor de 1.000 pacientes trasplantados, según datos de la ONG Amigos Trasplantados de Venezuela. Además, pacientes con lupus, artritis reumatoide y otras enfermedades autoinmunes también dependen de estos medicamentos para evitar graves complicaciones de salud.
De acuerdo con la Ley de Donación y Trasplante de Venezuela, el Estado está obligado a garantizar la medicación necesaria de forma gratuita, oportuna y permanente para mantener el órgano trasplantado y preservar la salud del donante.
Sin embargo, la ONTV ha denunciado reiteradamente que el acceso a estos fármacos ha sido intermitente e insuficiente, dejando a cientos de pacientes en una situación crítica.
ONTV exige respuestas al Ministerio de Salud
Ante este panorama, la ONTV hizo un llamado urgente a las autoridades sanitarias para que se garantice un abastecimiento continuo de inmunosupresores en el país.
«Reafirmamos nuestro compromiso con la defensa de los derechos de los pacientes y su bienestar, y esperamos una pronta respuesta del Ministerio de Salud para abordar esta situación crítica», señala el comunicado.
Pacientes y organizaciones del sector salud han alertado sobre el riesgo de perder órganos trasplantados debido a la falta de estos medicamentos, lo que podría significar un retroceso en los esfuerzos por mejorar la calidad de vida de estas personas.
Un problema que requiere soluciones inmediatas
Las organizaciones de pacientes han insistido en la necesidad de que el Estado cumpla con su responsabilidad de garantizar la distribución de inmunosupresores, ya que su interrupción puede provocar rechazo del trasplante, hospitalizaciones y hasta la muerte.
La ONTV reiteró que seguirá monitoreando la situación y presionando a las autoridades para que adopten soluciones urgentes que permitan a los pacientes mantener su calidad de vida y evitar complicaciones irreversibles.
La falta de respuesta del gobierno ante esta crisis médica sigue generando preocupación en la comunidad médica y en las organizaciones de derechos humanos, que han documentado la fragilidad del sistema de salud en el país.