La Organización de Estados Americanos (OEA) celebró este miércoles una sesión extraordinaria para discutir la creciente crisis en Venezuela.
La reunión comenzó con un informe de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que detalló los recientes abusos cometidos por las fuerzas de seguridad venezolanas en el último mes.
“La CIDH ha detectado un patrón preocupante de violaciones a la libertad personal, con al menos 1.600 personas detenidas, incluyendo 138 adolescentes, muchas de ellas en detenciones selectivas y arbitrarias”, afirmó Roberta Clarke, presidenta de la CIDH.
El informe también subraya que el Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela violó las leyes electorales al no publicar de manera detallada los resultados de los comicios del 28 de julio. Además, se destacaron los informes del Centro Carter y del panel de expertos de la ONU, que señalaron diversas irregularidades en el proceso electoral.
“Seguiremos vigilando muy de cerca la situación en Venezuela”, añadió Clarke.
Durante el debate, el representante de Canadá enfatizó que “una solución negociada es la única salida viable, y esta debe basarse en el respeto a los derechos civiles y políticos”.
El diplomático canadiense también subrayó que “las elecciones en Venezuela estuvieron marcadas por irregularidades y una evidente falta de transparencia, lo que ha sido señalado por varios expertos internacionales”.