El presidente Nicolás Maduro lanzó duras críticas contra Edmundo González, después de que este solicitara asilo político y denunciara presiones por parte del chavismo para firmar un documento en la embajada de España en Caracas.
«Es lamentable, señor González Urrutia, que usted, quien me pidió clemencia, no mantenga su palabra», declaró Maduro durante una reunión del Consejo Económico Productivo en La Guaira el pasado 19 de septiembre. “Con lo que insistió, ahora alega su propia torpeza y cobardía para salvarse. No sé qué intenta salvar, porque su moral ya la ha perdido para siempre”.
El mandatario venezolano instó a la población a no seguir perdiendo tiempo con figuras de la oposición, haciendo un llamado a centrarse en los esfuerzos productivos del país. «Aquí estamos los venezolanos que de verdad estamos en Venezuela, dispuestos a trabajar por la paz, la vida y el desarrollo de nuestra República. No más distracciones con esa gente».
Maduro continuó con sus críticas hacia el exiliado, descalificando su imagen. «Me da vergüenza ajena. Al final resultó ser un cobarde. Nadie puede justificar su traición y cobardía hacia sus propios seguidores», agregó.
Antes de salir del país, González Urrutia firmó un documento en el que reconocía la sentencia del Tribunal Supremo de Justicia sobre la validez de las elecciones y se comprometía a no participar en la política venezolana, tras la visita de los hermanos Jorge y Delcy Rodríguez a la embajada. Horas después de la firma, un avión español ingresó a Venezuela para trasladarlo al exilio.