El Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP) denunció que cuatro periodistas han sido acusados de terrorismo en Venezuela después de ser detenidos durante las manifestaciones que siguieron a las elecciones presidenciales del 28 de julio. El resultado oficial, que declaró ganador a Nicolás Maduro, ha sido objeto de fuertes críticas y protestas en todo el país.
A través de un comunicado en la red social X, el SNTP expresó su preocupación por el «uso indebido y arbitrario» de las leyes antiterroristas contra profesionales de la prensa, destacando que esta táctica está siendo empleada especialmente contra periodistas y reporteros gráficos que cubrían las protestas postelectorales.
Los reporteros gráficos Yousner Alvarado, de Barinas, y Deisy Peña, de Miranda, junto con el camarógrafo Paúl León, de Trujillo, y el periodista José Gregorio Carnero, de Guárico, enfrentan cargos de terrorismo. Según el SNTP, a estos periodistas se les ha negado el derecho a juramentar una defensa privada, lo que agrava aún más la situación.
Edmundo González Urrutia, líder de la principal coalición opositora, exigió la liberación de los periodistas y el fin de la persecución política. Según cifras oficiales del Gobierno, desde el 29 de julio, 2.229 personas han sido detenidas y acusadas de actos de violencia y vandalismo, enfrentando varios cargos criminales.
Gonzalo Himiob, vicepresidente de la ONG Foro Penal, declaró a EFE que la mayoría de los detenidos durante las manifestaciones están siendo acusados de terrorismo, en un patrón que la organización ha identificado como recurrente.
A diez días de los comicios, el Consejo Nacional Electoral no ha publicado las actas que ratifican la victoria de Maduro, como lo exige la ley. Mientras tanto, la principal coalición antichavista ha divulgado el 83,5% de las actas, argumentando que los documentos demuestran que González Urrutia fue el verdadero vencedor de las elecciones por un margen significativo.