El cambio de las lluvias al calor, y viceversa, motiva que el ambiente se llene de elementos que pueden producir las desagradables alergias. Cuando llega la época de sequía (verano), la aparición de pólenes aumenta las reacciones alérgicas y las rinitis en la población.
Por consiguiente, el desarrollo de alergias suele ser común en los cambios de clima. Es una patología común y consiste en la inflamación de las membranas mucosas de la nariz, provocando estornudos, congestión nasal, picazón en la nariz, paladar, garganta, ojos y oídos, las que suelen afectar la rutina diaria y el comportamiento normal de las personas.
Muchos medicamentos pueden servir o no para curarlas, pero algunos “remedios caseros” podrían ayudar. Aquí te presentamos algunos de ellos.
Agua y vinagre
Una de las medidas más básicas para eliminar el alérgeno del cuerpo es la ingesta de agua. Ayuda a la eliminación del alérgeno acumulado y también a no deshidratarse. Es mejor si esa ingesta se acompaña con vinagre de manzana que es un antihistamínico natural.
Té verde
El té verde posee un compuesto que bloquearía la producción de histamina e IgE, sustancias que desencadenan los síntomas de alergia.
Vitamina C
Ampliamente usada para tratar alergias y enfermedades respiratorias, porque inactiva las histaminas, la vitamina C es, además, un poderoso antiinflamatorio natural.
Probióticos
Existen bebidas lácteas y suplementos alimenticios que contienen microorganismos beneficiosos. Estos ayudan a mejorar la flora del sistema digestivo y desde ahí refuerzan la inmunidad.
Ajos y cebollas
Reconocidos aliados contra el cáncer y varias otras enfermedades por sus propiedades antibióticas, los ajos y cebollas también tienen un efecto mucolítico, broncodilatador y antiinflamatorio.
Cúrcuma
La cúrcuma es una planta de la India, el extracto de cúrcuma ayudaría a bloquear la producción de IgE, por lo que sería efectiva para aliviar o prevenir los síntomas de las reacciones alérgicas.
Omega 3
Conocida es la capacidad antiinflamatoria de los aceites grasos Omega 3. Los aceites ricos en esta sustancia, como el aceite de oliva extra virgen o el consumo de pescado, ayudan a reducir los síntomas de la alergia.
Magnesio
Este mineral protege los pulmones y mejora la respiración, además, ayuda a evitar los estornudos causados por alergia. Consume este mineral a través de alimentos como almendras, semillas de girasol y vegetales de hoja verde oscuro.
Vía Alimentatesano